El zinc apoya las reacciones enzimáticas necesarias para todo, desde la replicación del  ADN hasta la digestión de proteínas. Apoya el crecimiento y desarrollo adecuados, participando en la división y el crecimiento de las células, por lo tanto, las ingestas recomendadas son mayores para las mujeres que están amamantando.

El Zinc también es un componente importante la función inmune y favorece la cicatrización de heridas, aumenta el efecto de la insulina y es necesario para el olfato y el gusto, por lo que su deficiencia puede provocar una afección que reduce la capacidad de una persona para saborear.

Fuentes de Zinc: marañón, semillas de girasol, ostras, semillas de calabaza, carne de res, garbanzos, cocoa, cangrejo, langosta